sábado, 30 de enero de 2010

Peter Pan.

-¡Phill!-gritó Lily Evans, que venía corriendo con dos tostadas de mermelada de frambuesa en la mano-¿Dónde estabas? ¡El desayuno terminó hace media hora!

¡No! Me moría de hambre.

-Te he traído estas tostadas-dijo Lily entregándome mi desayuno.

-¡Eres mi diosa!-le alabe mientras me metía la tostada en la boca.

-Phill...-dijo suavemente una voz detrás de mi; me volví. Sirius me miraba con cara de perrito abandonado-Por favor-murmuró suplicantemente.

Lily nos miraba sin entender, al contrario que yo, que sabia exactamente lo que Sirius quería. Le entregué la tostada entera que tenía en mi mano derecha. Black sonrió, había conseguido su objetivo. Pero es que me era imposible resistirme a esa carita que ponía desde pequeño siempre que quería algo.

-¡Gracias, te debo la vida!-dijo antes de postrarse ante mi como si yo fuese una gran reina, cogerme de la cintura con la mano que tenía libre y darme un beso en la mejilla. Acto seguido se metió sin demora la tostada en la boca. Noté como se encendía mi mejilla, pero, al parecer, Sirius no lo hizo, estaba demasiado ocupado disfrutando bocado a bocado su única pieza de desayuno.

Seguimos andando hasta hacia los jardines, donde estaban los demás. Sirius aún me llevaba de la cintura, pues no había soltado el brazo, y Lily y yo caminábamos cogidas del brazo.

-¿Has hablado con Prongs?-preguntó Black cuando salíamos del castillo.

-Si, está igual de pesado que siempre, pero va madurando...¡cosa que deberías hacer tú!-dijo Lily señalándole con el dedo.

Sirius paró de andar y la miró.

-¡Jamás!

-¡Vamos Sirius, algún día tendrás que hacerlo!-insistió Lily. Black soltó mi cintura; de pronto, la sensación de tranquilidad y seguridad se esfumó rápidamente. Fulminé a Lily con la mirada ¿porque había tenido que empezar aquella estúpida conversación que me había separado de los seguros brazos de Sirius? Pero al parecer ella no se dio cuenta de eso, estaba demasiado ocupada obligando a Sirius Black a madurar.

Sirius sostuvo a Lily por los hombros y dijo con voz pausada y tranquila.

-Maduraré el día en que tu y Prongsie empecéis a salir.

-Mi eterno Peter Pan...-suspiré casi sin darme cuenta.

Lily rió y dijo:

-¡Para tu eterna desgracia!-era un acto infantil que no podía evitar: le saqué la lengua.

-¿Quién es Peter Pan?-inquirió Sirius.

-¡Magos!-suspiramos Lily y yo al unísono.

(********)

Los días pasaban, y las noticias del Profeta eran cada vez más espeluznantes: ataques de mortífagos, hombres-lobo asesinos y el-que-no-debía ser-nombrado en lo más alto del poder.

Y el Profeta de aquella mañana durante el desayuno del 9 de septiembre, por desgracia, no fue una excepción.

"Ayer por la mañana en el número 30 de Gon´ street , Johannes Corial, un mago de lustre linaje, fue encontrado asesinado junto a su esposa Laquima ,y sus tres hijos: Johannes II, Joseph y Cinthia, de siete, cinco y tres años respectivamente. Los cuerpos presentaban cientos de señales de la maldición cruciatus. Los aurores creen que fueron torturados hasta la muerte. El funeral...."

"Se hace saber que unos nuevos seguidores de el Señor Tenebroso, que se hacen llamar mortífagos, se han unido a sus filas. Un testigo los vio salir de la casa de los Corial anoche, entre ellos se reconoció a Bellatrix Black, Rodolphus Lestrange,y Narcissa Malfoy, recién casada del ya mortífago, Lucius Malfoy..."

Miré el plato de cereales que tenía frente a mí. Sentí náuseas.¿Cómo podía ser la gente tan cruel?

Peter me quitó el periódico de las manos al ver mi expresión, leyó rápidamente ambas noticias.

-¡Eh, Padfoot! ¡Aquí hablan de tus primas!-masculló-Por lo visto Narcissa se casó la semana pasada con Lucius Malfoy, y tu prima Bellatrix está comprometida con el viejo Rodolphus..! ¡Yo creía que estaba saliendo con McNair!

Sirius bufó, no le enorgullecía nada su apellido, le tenía un odio inmenso y lo detestaba.

-Pareces mi hermana Petunia y sus estúpidas amigas, está obsesionada con todo lo referente a la vida de aquellas personas que aparecen en las revistas-comentó Lily aburrida.

-¡Nick!-gritó Natalia levantándose rápidamente para saludar a su novio, un apuesto ravenclaw de cabellos rizados. El la cogió de la cintura y la besó con pasión.

-¿Que tal Nat?-preguntó, Natalia asintió como una tonta mientras se abrazaba a él fuertemente-¿Chicos?

-Bien-respondió Remus.

-¿Qué os toca ahora?-inquirió- Yo tengo Transformaciones con McGonagall.

-Voy contigo-susurró tiernamente su novia.

-Voy con vosotros- suspiró Lily, puesto que sabia que la clase iba a ser más aburrida sin Natalia, puesto que se sentaría con Nicholas.

Los tres se levantaron y se dirigieron a las puertas.

Fijé mi mirada en James, que miraba su horario con una peculiar y pícara sonrisa.

-¡Chicos!¡Esperadme!-exclamó, y como alma que se lleva el diablo, salió corriendo detrás de ellos.

Cuando desparecieron tras la puerta del Gran Comedor, saqué los horarios de mi mochila y los ojeé. Tenía Encantamientos con Flitwick y con los de Slytherin; durante las siguientes 2 horas teníamos Pociones con Slughorn ¡el y su estúpido Club de las Eminencias!, entonces me dí cuenta de algo.

-¡No me lo puedo creer!-exclamé-¡Todos los lunes tenemos tres horripilantes horas seguidas con los bobos de Slyhterin! ¡Encantamientos y dos horas de Pociones!

Peter me miró con expresión de horror, no le caían nada bien los Slytherin. En cambio Sirius sonrió y se le ilumino la mirada.

-¡Tres horas con el llorica de Snivellus!-murmuró encantado.

Le miré confundida y enfadada.

-Creía que ya no le embrujabais ni os burlabais de él.

-Creías-me aclaró Remus, que había asomado la cabeza por encima de su gordo ejemplar de Pociones de último curso.

-Pero si no os he visto embrujarlo, "El Gran Show de Como Fastidiar a el Idiota de Snivellus" no ha actuado desde el curso pasado-insistí-Además ¿no se supone que habías madurado de una buena vez?

-Exacto: se supone-explicó Black-¿¡Es que hay que explicártelo todo!? ¡Parece que no conozcas a los Merodeadores!

Bufé.

-Vámonos, ¡o llegaremos tarde a clase!

-Por favor Wormtail ¡todavía es pronto!

Llegamos tarde a clase de Encantamientos.

-Llegan con retraso señores.

-Lo sentimos profesor Flitwick- me excusé mientras maldecía mil y un veces a Sirius Black por hacerme llegar tarde a la primera clase de la semana.

Rápidamente cogí a Remus del brazo y lo llevé conmigo a un pupitre de la tercera fila.

Sirius se dirigió a su asiento con tranquilidad, seguido de Peter, que lo miraba con admiración. Se colocó para su felicidad, detrás de Snape, que se sentaba con su amigo, el idiota de Nott.

-Buenos días-saludó ,pícaro, Peter. Snape sólo bufó. Fue entonces cuando, Sirius continuó la jugarreta y le dio una cachetada.

-Es de mala educación no responder a un saludo Snivellus-aquella era ,sin duda, una de las clases favoritas de Sirius, porque Flitwick no se daba cuenta de lo que pasaba a su alrededor, ya que, estaba tan ocupado reparando los destrozos que causaban los alumnos al pronunciar o ejercer mal los hechizos, que era absolutamente inmune a cuchicheos entre el alumnado.-¿Me has escuchado Snivellus? O tienes tal cantidad de grasa en el pelo que te sirve para hacerte tapones para los oídos-insistió al ver que este no le hacía caso-Mmm...parece que a la serpiente se le ha comido la lengua el gato...

Las babosas risotadas de Peter fueron continuadas de un destello de luz, que dio cómo resultado una imagen de Snape colgando de un sólo tobillo boca abajo; que segundos después fue liberado con un -¡¡Liberacorpus!!-.

Snape cayó de cabeza encima de el pupitre. La mayoría de la clase estalló en carcajadas.

-¿Te encanta ese hechizo ,verdad? La última vez acabaste sin calzoncillos e insultando a la única persona con sentido común de Hogwarts que te dirigía la palabra...-murmuró algo que no llegué a escuchar.

-¡Ya están otra vez!-musitó Remus aburrido, a mi vera.

-¿Qué es este escándalo?-chilló Flitwick girándose-Señor Snape, ¿qué hace en el suelo tirado?¡Haga el favor de levantarse!

El maestro más bajito de todo Hogwarts no volvió a su explicación hasta que, varios minutos más tarde, Snivellus consiguió ponerse de pié y sentarse correctamente en su pupitre. Justo cuando esto paso, Snape aprovechó para hechizar a Sirius.

-¡¡Expelliarmus!!-Sirius saltó por los aires junto a su varita, chocó contra la pared con un fuerte golpe, y se escurrió hasta el suelo con una fea mancha de sangre en la cabeza.

Algunas chicas Ravenclaw del final, encantadas, se acercaron a ayudarle.

-¡¡Accio varita!!

La varita de Snape fue cogida al vuelo por el profesor Flitwick, que parecía realmente enfadado. Me levanté y asustada me acerqué a Sirius. Estaba semi-incosciénte y murmura palabras incoherentes. Tape la herida sangrante de la parte posterior de su cabeza con un pañuelo.

-¡¡Señor Snape!! ¡No me esperaba semejante acto de usted! ¡Acompáñeme a el despacho del director! ¡Y por cierto! ¡150 puntos menos para su casa!-en mitad de tal regañina, me pareció escuchar un leve risita proveniente de Sirius- He de ir con el señor Snape a el despacho del profesor Dumbledore, señor Lupin, quédese al mando de la clase,ahora necesito a alguien que acompañe a el señor Black a la enfermería...-no hubo terminado aquella frase cuando todas las manos femeninas de la sala fueron levantadas, todas menos la mía, que aún seguía presionando con suavidad la sangrante herida de Sirius.

El profesor Flitwick observó la clase algo escéptico, luego me miró fijamente.

-¿Señorita Michiggan?-me preguntó-¿Le importaría acompañar a su amigo a la enfermería?

Observé la clase con atención, todas las chicas de la clase me miraban ansiosas ,puesto que pensaban que rechazaría, ya que mis múltiples peleas con Black eran famosas en todo Hogwarts. Y al pensar que alguna de ellas podría aprovecharse de él (o al contrario),algo se revolvió en mi interior. No, aquello no iba a pasar.

Con un movimiento de cabeza le indiqué a Flitwick que yo lo acompañaría. Ayudé a Black a levantarse y ha apoyarse en mi hombro; he ignorando las miradas asesinas de aquel aula, salí de allí.

Cuando la puerta se cerró, ya más consciente, me miró unos segundos y dijo:

-Fue divertido.

Le devolví la mirada extrañada.

-¿¡Tu estas loco o qué!? ¡Snape te podía haber hechizado con algo mucho peor, ya sabes como es la gente con la que se junta! ¡Y ahora te tendrá más manía todavía! (Lo cuál es casi imposible)¡Y has salido herido! ¡Es que no tienes sentido común Black! ¡O te lo abdujeron los extraterrestres junto al poco cerebro que tenías!...

-¿Qué son los extraterrestres?

Ignoré su pregunta y continué:

-¡La verdad es que dudo que hayas utilizado alguna vez ese poco cerebro que tenías! ¡Eres un insensato, un vago, un.....!

-¿Sabes que estas preciosa cuando alzas la ceja?-me interrumpió. Me quedé callada, meditando durante unos segundos lo que acababa de pasar y cuál había sido mi reacción, es decir quedarme algo atontada. El sonrió.

-¿Sabes que pareces el cerebro de un asqueroso moco de troll cuando intentas convencerme como si fuera una chica cualquiera?-aquello le borró la sonrisa de los labios, pero luego sus labios volvieron a estirarse y con voz ronca me dijo:

-¿¡Quién demonios ha dicho que seas una chica cualquiera!? ¡Jamás diría eso! ¡Tu eres de todo menos normal!-con esa última frase consiguió una buena cachetada.

-¡Vete a la mierda Black!-grazné y me fui echando humo por las orejas dejando a aquel estúpido en la puerta de la enfermería.

(***)

-¡Es un autentico desagradecido! ¡Encima que lo acompaño a la dichosa enfermería!-le explicaba a Lily durante la clase de Slughorn cuando fuimos a coger la piel de cobra egipcia y los ojos de hurón azul al armario-¡No lo soporto!

Ella me miró escéptica.

-¡Oh!-aplastándome la mano contra la frente-Lo siento, se me había olvidado ¿qué tal con James?

-La verdad es que bastante bien, por lo visto ya no embruja a Sev...,digo a Snape; aunque por lo visto Sirius sigue en las mismas; se porta conmigo muy bien...

-Creo que deberías confesarle quien es X , el pobre lo está pasando mal-le dije.

-¡De eso ni hablar! Todavía no estoy preparada..y tampoco creo que él lo esté...

-¡Lily, por Merlín! Lleva años enamorado de ti..

-No se... Lo haré cuando esté lista-suspiré, pero asentí conforme a su decisión.

-Señoritas, por favor ,vuelvan a sus asientos, tengo que empezar la clase-nos pidió Slughorn.

Lily se sentó junto a James y Mery rápidamente, al igual que yo lo hice junto a Natalia y Peter.

-Bueno-empezó Slughorn-Hoy empezaremos con las pociones del nivel 12...

Tres golpes rítmicos en la puerta seguidos de un -¿Se puede?-de Sirius interrumpieron al rechoncho profesor.

-S, si claro, por supuesto que sí señor Black; creo que sus compañeros-dijo Slughorn haciendo un leve movimiento con la mano ,señalando a Remus y a Sebasthian-La señorita McGonagall me ha explicado lo que pasaba ¿estás bien?-Black asintió levemente mientras se sentaba-Bueno, como iba diciendo: Hoy empezaremos las pociones del nivel 12, ¿alguien sabe lo que significa eso?

Fueron varios las manos levantadas.

-¿Si, señorita Prewett?

Mery no llegó a decir nada, pues otros tres golpes secos y nada rítmicos comparados con los de Sirius, resonaron a otro lado de la puerta.

-Adelante-masculló Slughorn algo molesto con tanta interrupción.

Por la puerta apareció un cabizbajo Snape, aunque tenía tal odio en la mirada que daba verdadero miedo.

-Severus-dijo el profesor-como tu profesor y jefe de la casa Slytherin estoy muy avergonzado contigo. Lo que has echo se merece un buen castigo, aunque de eso ya hablaremos más tarde, de momento quedas expulsado...-algunos contuvieron el aliento, pero nadie, ni siquiera Lily o alguno de sus amigotes de Slytherin movió un misero dedo por él. No se lo merecía-...del Club de las Eminencias y sus respectivas reuniones-Snape se mantuvo en su sitio, parecía que de un momento a otro iba a apartar aquella horrible melena grasienta y echar fuego por la boca todos los presentes-Y ahora haz el favor de sentarte.

Snivellus se sentó en la otra punta de la clase a nosotros ,y como de costumbre en aquella clase desde hacía dos años, o mejor dicho desde su discusión con Lily, se sentó solo.

-Continuemos-dijo el jefe de a casa de las serpientes-¿Señorita Prewett?

-El que empecemos el nivel 12 de pociones significa que a partir de ahora elaboraremos pociones de nivel excesivamente avanzado para nuestra edad, ya que algunas son mortales sólo con olerlas-cogió aire-todas las pociones están reguladas por el Departamento de Pociones y Hechizos Avanzados del Ministerio de Magia.

-¡Excelente!¡10 puntos a Gryffindor por parte de la señorita Prewett!


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Votaciones!!